Kirishiki Sunako

Descripción física

Sunako es una "joven" que se caracteriza por tener unos grandes ojos de color negro, que suelen verse como dos enormes huecos; estos están enmarcados con largas pestañas negras. Una chica de estatura baja para su edad, midiendo unos 1'47 metros de altura. De complexión menuda. Su peso se mantiene en los 50 kg. Cabello largo que cae hasta la parte inferior de su cintura, el cual es levemente ondulado y de un tono violeta oscuro. Su rostro es ordenado, aunque un tanto peculiar por sus ojos. Su piel es blanca, pálida.

Descripción Psicológica

Sunako es una niña misteriosa que parece ser bastante infantil y juguetona cuando apareció por primera vez. Disfruta de la lectura de libros, ya que mientras fue confinada por su familia leyó muchos de ellos, sobretodo los de Muroi Seishin. Muestra un conocimiento que un niño de su edad no debería tener y presenta unos niveles de afiliación religiosa, en especial hacia el tema de la muerte, lo que hizo que Seishin descubriera su verdadera naturaleza.

Ella es la verdadera líder de los Shiki, y como tal, es la más madura y comprensiba, ya que era la figura materna de Chizuru porque, aunque no lo aparente, es la más mayor de todos ellos, como se demostró cuando Sunako le cuenta a Tohru su historia, sintiéndose culpable por haber matado a Natsuno.

A pesar de todo lo que había hecho, ella es una de los Shiki que no mata por malicia o por diversión, sino tan solo para sobrevivir y honestamente quería crear un lugar seguro para los Shiki, por lo que ya no tendrían que esconderse y serían aceptados. Ella también se preocupa por sus compañeros, su familia adoptiva y por Seishin, como cuando supo de la muerte de Chizuru e igual cuando Seishirou fue a vengarse y veía que no regresaba y temía que si se quedaba dormida, sería la última vez que viera a Tatsumi y Seishin. En general, no era más que una niña solitaria que solo quería ser aceptada por la gente.